Granier después de visitar su despacho en la ciudad de México. Foto: Miguel Dimayuga
Proceso.
El exgobernador de Tabasco, Andrés Granier Melo, rechazó que durante su gestión (2007-2012) hubiera encubierto “acciones u omisiones” que generaran daños al erario o “un enriquecimiento indebido de mi parte”.

Además, responsabilizó al gobierno de Arturo Núñez Jiménez de orquestar la campaña de desprestigio en su contra, y lo acusó de emplear las instituciones y leyes penales “con un ánimo persecutorio en mi perjuicio”.

Durante su comparecencia en la Unidad de Fiscalización de Lavado de Dinero de la Subprocuraduría Especializada de Investigación en Delincuencia Organizada (SEIDO), que cumplía más de 12 horas, el exfuncionario manifestó que no ha cometido delito alguno en relación con los hechos que se le atribuyen, entre ellos la desaparición de mil 900 millones de pesos de recursos federales que no se aplicaron en salud, educación y seguridad pública.

“No di lugar a tramas financieras o empresariales que fueran el medio para la realización de conductas perjudiciales del patrimonio público de esta entidad federativa”, puntualizó Granier Melo.

Esta noche, la Procuraduría General de la República (PGR) informó que hasta el momento Granier Melo continúa declarando ante el Ministerio Público Federal y será hasta que concluya su declaración ministerial cuando la dependencia informe “en su oportunidad sobre la situación del exmandatario tabasqueño”.

La PGR confirmó, en un comunicado, que Granier seguía declarando en compañía de su abogado, Eduardo Luengo Creel, en torno a la averiguación previa VEIORPISAM/AP/ 078/2013.

Sobre las acusaciones de enriquecimiento a costa del erario que hizo su sucesor, Arturo Núñez, el exmandatario tabasqueño manifestó que el PRD “ha representado una oposición sistemática, consistente, que se expresa en acciones muy concretas y en señalamientos que considera definitivos para atacar o desprestigiar al PRI”.

Añadió:

“De acuerdo con su naturaleza y fines, (el PRD) tiene propósitos definidos de permanecer en el ejercicio del poder estatal en Tabasco, en perjuicio de la alternancia política. Por esta razón, de manera inmediata a la asunción del poder por parte del gobernador en turno se ha desplegado una campaña de desprestigio”.

Según Granier Melo –acusado de los presuntos delitos de peculado y ejercicio indebido de recursos públicos–, los “acusadores e investigadores” que comparecen ante los medios de comunicación social no han tomado en cuenta hechos que confirman que “no he realizado conductas típicas ni delictuosas”.

Entre esos hechos mencionó que la cuenta pública en cada año de su gobierno fue aprobada por el Congreso de Tabasco, y en cuanto a las participaciones federales manifestó que los recursos utilizados tras las catástrofes provocadas por fenómenos naturales estuvieron vigilados por las autoridades para evitar desvíos, actos de corrupción o enriquecimientos indebidos por parte de servidores públicos estatales o federales.

Respecto de las acusaciones que se le formulan, Granier Melo aseguró que todos los actos que realizó como gobernador “estaban sujetos a los controles difuso, convencional y constitucional que impiden la arbitrariedad, la injusticia y la inmoralidad pública”.

Al cierre de esta edición, la comparecencia de Andrés Granier Melo no había concluido.

Se victimiza


Acorralado por la justicia estatal y federal, Granier Melo no tuvo más remedio que victimizarse públicamente.

Horas después de su llegada a la Ciudad de México y antes de comparecer de manera voluntaria ante la Unidad de Lavado de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO), el exfuncionario acusado por su sucesor, el perredista Arturo Núñez, de enriquecerse a costa del erario, concedió una entrevista al programa Telerreportaje en el que reveló que padece hipertensión arterial y “un problema de próstata”.

Además, aseguró que está amenazado de muerte por parte del crimen organizado, por lo que anticipó que no comparecerá ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) este viernes 14 para responder a los cargos por los presuntos delitos de peculado, ejercicio indebido de recursos públicos, entre otros que se desprendan de la indagatoria que tiene abierta en aquella entidad.

Según él, no tiene las garantías necesarias para presentarse ante el Ministerio Público del fuero común.

Eso sí, ofreció aclarar “punto por punto” las imputaciones que pesan en su contra por el supuesto desfalco de mil 800 millones de pesos.

En la entrevista con la emisora tabasqueña, la más importante e influyente de la entidad, Granier Melo explicó que ha perdido muchos kilos por el problema de próstata que padece, aunque aclaró que está bajo tratamiento en Miami y en el DF.

También comentó que arrastra otro padecimiento, la presión arterial alta.

Luego de confesar que se siente acosado por la prensa, reiteró que jamás pensó en huir de Tabasco, que lo único que hizo fue irse a Miami para guardar distancia con el gobierno perredista, atender su salud y librarse de las amenazas del crimen organizado.

“Fue una amenaza palpable, directa, me dijeron que me iban a matar”, manifestó, y lamentó que hace tres semanas se le haya retirado la guardia personal que lo custodiaba por reformas a la Ley de Seguridad Pública que el Congreso del estado aprobó hace un mes.

Granier indicó luego que no tiene ninguna razón para no volver a Tabasco y aclarar “punto por punto” las acusaciones que se le hacen sobre el multimillonario desfalco a las arcas, pero arguyó que no quiere politizar el caso ni “causar un gran revuelo” con su presencia.

Ante el ofrecimiento del procurador general de justicia del estado, Fernando Valenzuela Pernas, de garantizar su seguridad tan pronto arribe a Tabasco, o incluso tomarle la declaración en el Distrito Federal, Granier Melo dijo que agradecía las facilidades, pero que lo analizaría con sus abogados.

Subrayó que su estado de ánimo es bueno y que su prioridad es aclarar las denuncias en su contra y limpiar su nombre, así como levantar la  moral de su familia que, dijo, se encuentra en la Ciudad de México y Tabasco, no en Miami.

El funcionario priista reiteró también que su exsecretario de Finanzas, José Manuel Saiz Pineda, preso en Tabasco, tiene “toda la documentación” para aclarar la desaparición de mil 900 millones de pesos de recursos federales que no se aplicaron en salud, educación y seguridad pública, y se volvió a desmarcar del hallazgo de los 88.5 millones de pesos en efectivo en la refaccionaria Jomali, propiedad de Abraham Cupil Córdova, padre de Marlis Cupil, contadora y secretaria de Saiz Pineda.

“No conozco a esa señorita, soy ajeno e inocente a eso”, respondió, e insistió que Tabasco no está en quiebra por las “buenas notas” que calificadoras internacionales dieron sobre la deuda pública del estado antes de dejar el gobierno.

Comparece ante la SEIDO


Luego de las declaraciones a Telerreportaje, Granier Melo se presentó de manera voluntaria en las instalaciones de la SEIDO, acompañado por sus abogados encabezados por Eduardo Luengo.

Antes de cruzar la puerta, declaró a los medios que va a limpiar su nombre. “No tengo nada absolutamente que ocultar”, subrayó.

La comparecencia del exgobernador duró más de cinco horas.

En Tabasco, el procurador Valenzuela Pernas informó que se giró un oficio a Granier para que comparezca el próximo viernes 14 a las 18:00 horas. Incluso, adelantó que buscaría al abogado Eduardo Luengo Creel para decirle que su cliente tiene plenamente garantizada su integridad física.

Asimismo, dijo que Granier Melo está llamado a declarar en calidad de probable responsable de los delitos de peculado, ejercicio indebido de recursos públicos y los que se puedan desprender de la indagatoria.

El encargado de la procuración de justicia en Tabasco comentó también que la integración de la averiguación previa iniciada contra Granier y Saiz Pineda, entre otros exfuncionarios, no deberá tardar más de dos semanas en concluirse, y, aún más, adelantó que habrá más detenciones por el lado federal.

Sin ofrecer más detalles por el sigilo en las investigaciones, Valenzuela Pernas mencionó “que el abanico es muy grande en la complejidad de la investigación” y la PGJE tiene tres órdenes de aprehensión por cumplimentar y que sólo se ha ejecutado una, en la persona del exdirector “A” de la Subsecretaría de Egresos, Leoncio Lorenzo Gómez, por el presunto robo de una camioneta con documentación contable del gobierno de Andrés Granier, en agosto del año pasado.

Catean propiedades


Agentes ministeriales de la PGR catearon la casa de Mariana Granier Torres, hija del exgobernador Granier, como parte de las investigaciones del presunto desfalco a la entidad.

El inmueble ubicado en el fraccionamiento Real del Sur es custodiado por efectivos locales y federales.

En tanto, el abogado defensor del extesorero, Xavier Olea, rechazó que su cliente Saiz Pineda conozca a la excajera general de la Secretaría de Administración y Finanzas, Esperanza Mayo, arrestada por agentes de la PGR el pasado lunes 10 e ingresada al Centro de Readaptación Social del Estado (Creset).

“(Saiz Pineda) no conoce a la señora Esperanza, no la ubica”, aseguró el abogado litigante, y aventuró que una vez que concluya el proceso legal sobre el “saqueo” a Tabasco, el gobernador Arturo Núñez “será el gran perdedor”.

“Las pruebas presentadas contra mi cliente son simples conjeturas que no llegan ni a indicios, son inexistentes”, aseguró.

SAT rastrea cuentas de Granier y su familia


Desde hace dos meses, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) rastreó las cuentas bancarias de los hermanos Saiz Pineda y solicitó a la CNBV embargarlas precautoriamente.

Por otra parte, el jefe del Servicio de Administración Tributaria (SAT), Aristóteles Núñez, aseguró que el año pasado fueron embargados bienes a familiares del exgobernador de Tabasco, aunque algunos fueron devueltos tras pagar los impuestos correspondientes.

Sin ofrecer mayores detalles, el funcionario federal mencionó que hay una colaboración entre la PGR y otras instancias en el caso, y añadió que como autoridad fiscal el SAT puede llevar a cabo embargos (no decomisos) a aquellos contribuyentes con adeudos fiscales, esto como medida precautoria, y si esas personas pagan los impuestos que deben, el bien embargado le es devuelto. (Con información de Armando Guzmán)
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