Jorge Diaz. Está en nuestra genética nacional.

· Las reformas no son las mejores, sino las posibles; frase que se convertirá (sino es que ya lo es) en un clásico de nuestros representantes políticos. Diputados y Senadores en un lodazal de intereses, mientras lo último que cuenta para ellos es el bienestar de los mexicanos.

· Los sindicatos y sus líderes, son intocables y se sirven a manos llenas mientras, las bases que los soportan los aclaman; bajo presión dirán algunos, pero yo me pregunto si no será también una cadena de privilegios, conformidad, colusión, mediocridad y desinterés.

· Distintos órganos económicos del país y uno que otro opositor despistado, le tiende la cama fácil al próximo presidente: “será difícil, si no imposible, que Peña Nieto cumpla las promesas de campaña por la falta de recursos que se padece en México”. Favor gordo el que le hacen al priista, puesto que ya le están dando la disculpa por adelantado. Creo que lo más sensato es exigirle desde este momento que cumpla lo que dijo en lugar de darle excusas. Que le haga como pueda, puesto que la boca ya la abrió mientras pedía el voto.

· AMLO en el mismo tono intransigente, no cambia y no cambiará, destinado al olvido y a defraudar a tantos millones que votaron por él. Por lo pronto se anda haciendo su partido para vivir del erario ¡bendito defensor del pueblo bueno!

· Y como en cada sexenio, una cosa es lo que se dice y otra cosa es lo que es. El presidente durante el próximo sexenio será Luis Videgaray y Peña Nieto sólo ocupará Los Pinos. Los medios de comunicación, analistas y especialistas en distintas materias (todas ellas relacionadas con la cosa pública) fundan sus análisis, opiniones, pronósticos y reflexiones basados en lo que declara Luis Videgaray. Échele un vistazo a los periódicos, el hombre importante (o el que posee el cerebro) es la mano derecha del de Atlacomulco. Peña Nieto está para la bonita foto y la declaración cantinflesca, de ahí en fuera, se hace a un lado.

· Y los panistas, se irán dentro de poco derechito al rancho de López Obrador, pero con las bolsas llenas.

En síntesis, querido lect@r, no se haga muchas ilusiones: Nunca habrá reformas que nos beneficien, los líderes charros de México seguirán ondeando la reata sobre el país, Peña Nieto y su equipo no cumplirán al 100%, pero siempre tendrán una buena excusa para explicarlo, AMLO seguirá hundiendo nuestras esperanzas con la bandera de la esperanza en la mano, nuestro presidente (como los últimos cuatro por lo menos) no será quien verdaderamente mande sobre los designios de la patria, los políticos se seguirán llenando las bolsas con lo poco que queda de la nación y Usted y yo, seguiremos esperando el cambio.

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