La Jornada. Usuarios de Banamex, tanto turistas como trabajadores locales de gobierno e iniciativa privada, sufrieron presuntamente el hackeo de sus cuentas de nómina, las cuales aparecieron la mañana de este martes en ceros y con los números de identificación o nip modificados. Los afectados podrían ser decenas o cientos.

Alrededor del mediodía, en la sucursal Banamex del centro de congresos Copacabana, en la zona dorada de Acapulco, los ánimos se caldearon, pues más de 50 quejosos hacían fila en el banco para exigir una respuesta, la cual no hubo.

Los trabajadores bancarios se limitaron a proporcionar un número telefónico 01800 y un formato del banco, cuya respuesta tarda en llegar alrededor de 30 o 40 días.

Entre los cuentahabientes perjudicados se encuentran trabajadores del magisterio, turistas de diversas entidades de la República mexicana, empleados estatales, federales y de empresas privadas.

Una de las afectadas, Ila Kuri, catedrática de una universidad privada del puerto, explicó que al introducir su tarjeta de nómina en el cajero apareció un mensaje de "nip equivocado", y al solicitar su estado de cuenta en la caja, éste aparecía en ceros.

Gerentes del banco exigieron que reporteros salieran de la sucursal y posteriormente cerraron las puertas sin dar una explicación.

Algunas usuarias reclamaban su saldo entre llantos, y otra más criticó que la cajera que la atendía simplemente desapareció cuando arribó un grupo de reporteros. Una de las perjudicadas exigió su ahorro de tres quincenas.

Un turista del estado de México reclamó que no podrá disponer de su dinero en este puente vacacional.

En la misma situación se encuentran 25 trabajadores de la Secretaría de Fomento Turístico estatal. Sin embargo, algunos usuarios que consultaban su saldo en el cajero no constataron mayor problema. En las sucursales de Cuauhtémoc y Costera se registró calma.

En el exterior del banco, un policía municipal explicó que los directivos del banco solicitaron su presencia debido a que cuatro personas armadas se habían introducido a la sucursal, pero explicó que no actuaron al percatarse que se trataba de tres reporteros y un camarógrafo.

Al preguntar lo sucedido a comunicadores, un policía vial señaló que "lo mismo nos podría pasar a nosotros".

Hasta las 13 horas, numerosos cuentahabientes esperaban una respuesta de qué sucedió con sus ahorros.

Profesores advirtieron que este miércoles tomarán el banco si su saldo no aparece registrado.
La Jornada.

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