Hace casi medio año que la Policía Estatal Acreditable (PEA) de Tamaulipas, cateó el penal de Matamoros encontrando marihuana, armas punzo cortantes, aparatos celulares, televisores y demás accesorios prohibidos que entorpecen la readaptación de los internos. De los más de 900 reclusos, ninguno fue sancionado, tampoco los directivos del Centro de Ejecución de Sanciones (CEDES). Después de aquel cateo “sorpresa” registrado en abril, para el mes de julio un internó fue asesinado y este 4 de octubre estalló una rebelión en el área de mujeres de la cárcel del ejido Santa Adelaida que dejó como saldo extraoficial dos personas lesionadas.
La disputa por el poder al interior del CEDES y el intento de fuga de un grupo de internos, dicen que fue el origen de la riña. La realidad es que coincide con la llegada del nuevo gobierno tamaulipeco que ahora comanda, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, el primer gobernador panista en la historia de la democracia tamaulipeca.
Eran casi las 23 horas cuando en redes sociales comenzaron a difundir que al interior del penal como en áreas aledañas se escucharon detonaciones y de manera extraoficial se informó que una enfermera y un recluso habían sido heridos de bala, mientras que al poniente del reclusorio, las internas provocaron un incendio y se enfrentaban con efectivos de la policía local quienes trataron de controlar la situación.
Trascendió que el conflicto comenzó desde las 21 horas exactamente en el módulo femenil, el Gobierno de Tamaulipas, pretendía que la información no se difundiera, sin embargo la crisis aumentó y se prolongó hasta pasada la media noche, incluso no se proporcionó información oficial de los hechos.
En octubre de 2011 cuando Egidio Torre Cantú, apenas tomaba el control de Tamaulipas, se vivió una riña en el penal de Matamoros, que dejó como saldo 20 reos muertos y otros 12 lesionados; otra coincidencia con ese extraño dicho de “la limpia” que se relaciona con cada cambio de mandato gubernamental, como si delincuentes y gobernantes hicieran equipo por algunos intereses en común.
davidcastellanost@hotmail.com
La disputa por el poder al interior del CEDES y el intento de fuga de un grupo de internos, dicen que fue el origen de la riña. La realidad es que coincide con la llegada del nuevo gobierno tamaulipeco que ahora comanda, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, el primer gobernador panista en la historia de la democracia tamaulipeca.
Eran casi las 23 horas cuando en redes sociales comenzaron a difundir que al interior del penal como en áreas aledañas se escucharon detonaciones y de manera extraoficial se informó que una enfermera y un recluso habían sido heridos de bala, mientras que al poniente del reclusorio, las internas provocaron un incendio y se enfrentaban con efectivos de la policía local quienes trataron de controlar la situación.
Trascendió que el conflicto comenzó desde las 21 horas exactamente en el módulo femenil, el Gobierno de Tamaulipas, pretendía que la información no se difundiera, sin embargo la crisis aumentó y se prolongó hasta pasada la media noche, incluso no se proporcionó información oficial de los hechos.
En octubre de 2011 cuando Egidio Torre Cantú, apenas tomaba el control de Tamaulipas, se vivió una riña en el penal de Matamoros, que dejó como saldo 20 reos muertos y otros 12 lesionados; otra coincidencia con ese extraño dicho de “la limpia” que se relaciona con cada cambio de mandato gubernamental, como si delincuentes y gobernantes hicieran equipo por algunos intereses en común.
davidcastellanost@hotmail.com