Son ya diez meses de presidencia para el fanfarrón de la Casa Blanca, mismos que se han aprovechado para escribir millones de textos en todo el mundo analizando la posibilidad de un juicio político por todas las irregularidades en su campaña y no ha pasado nada. También se plantea su renuncia forzada para no exponerse a la humillación. Nada.
Todos son deseos, en algunos casos no dudo que existan argumentos sólidos para la destitución del hombrecillo naranja, en caso de que en los Estados Unidos existiera la voluntad y el momento político propicio. Pero parece que por el momento no hay voluntad ni existe el momento político propicio.
El brabucón imbécil sigue estando fuerte en su base de votantes que lo llevó a la presidencia por increíble que parezca y todos los escándalos que lo rodean no le han tumbado un pelo al peluquín.
Mientras siga así, la amenaza contra México y el mundo sigue latente. Si se le logra dar un rasguño a su presidencia, pues será peor, porque muy probablemente querrá dar una demostración de fuerza y los más vulnerables somos nosotros. En fin que la cosa sigue siendo muy delicada.
Eso sí, todas esas voces que gritan por todos lados que su renuncia o juicio político están cerca, me recuerdan mucho a quienes le apostaron a la renuncia de Peña Nieto cuando lo de la Casa Blanca o lo de los 43, etc. En realidad nada justificaba una renuncia del mandatario mexicano.
Por eso dudo más sobre la posible salida al basurero de la historia del infumable gringo.
Twitter: @adejorge
Todos son deseos, en algunos casos no dudo que existan argumentos sólidos para la destitución del hombrecillo naranja, en caso de que en los Estados Unidos existiera la voluntad y el momento político propicio. Pero parece que por el momento no hay voluntad ni existe el momento político propicio.
El brabucón imbécil sigue estando fuerte en su base de votantes que lo llevó a la presidencia por increíble que parezca y todos los escándalos que lo rodean no le han tumbado un pelo al peluquín.
Mientras siga así, la amenaza contra México y el mundo sigue latente. Si se le logra dar un rasguño a su presidencia, pues será peor, porque muy probablemente querrá dar una demostración de fuerza y los más vulnerables somos nosotros. En fin que la cosa sigue siendo muy delicada.
Eso sí, todas esas voces que gritan por todos lados que su renuncia o juicio político están cerca, me recuerdan mucho a quienes le apostaron a la renuncia de Peña Nieto cuando lo de la Casa Blanca o lo de los 43, etc. En realidad nada justificaba una renuncia del mandatario mexicano.
Por eso dudo más sobre la posible salida al basurero de la historia del infumable gringo.
Twitter: @adejorge