![]() |
De esta forma, los legisladores y el presidente de EE.UU. han cancelado la decisión de la Oficina de Protección Financiera del Consumidor que impedía a los bancos y empresas de emisión de tarjetas de crédito frenar las demandas colectivas de sus clientes, informa el diario 'The Hill'. Antes de esta iniciativa los bancos obligaban a los clientes a renunciar su derecho de presentar demandas colectivas a la hora de abrir las cuentas.
Las demandas colectivas resultan rentables para los clientes, ya que se abaratan los costos legales.
Se trata de la primera acción presidencial de Trump que busca aliviar las restricciones impuestas a los bancos a raíz de la crisis de 2007-2009, informa Reuters. No en vano, una de las principales promesas electorales del actual mandatario estadounidense pasaba por aligerar la regulación del sector financiero.
Vía: RT.