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En ese sitio, se encontraba instalada una jardinera perimetral y de acuerdo con los peritajes en arquitectura se detectó que cuatro trabes principales y secundarias no eran concordantes por placas deformadas y pernos degollados.
La PGJ-CDMX indicó que el espacio colapsado ocurrió en la estructura de la zona nor-oriente, que comprende la fachada B y pasillo denominado cantiliver.
Al igual que el Cuerpo de Bomberos de la capital, los servicios periciales descartaron que alguna persona resultara lesionada o fallecida como resultado del hecho.
De las entrevistas obtenidas de los gerentes de seguridad y de operaciones, así como del director de la construcción, se establece que la plaza comercial terminó de edificarse en marzo del presente año y no estaba en operación al público, ya que sólo los arrendadores realizaban trabajos para uso.
La Procuraduría capitalina aclaró que mantiene asegurado el inmueble para continuar los peritajes en diversas materias y se dará apertura a los trabajos de demolición a la Secretaría de Protección Civil, para reabrir la vialidad en la zona. En tanto, la investigación continúa para deslindar responsabilidades.
Vía: MVS.